Rinoplastía
Rinoplastia
La nariz juega un papel fundamental en la estética facial. En ocasiones, el tamaño y/o forma de la nariz pueden estar alterados y comprometer la armonía global de la cara. La rinoplastia es “la cirugía de la nariz”.
Nariz demasiado grande
En algunos casos, el tamaño de la nariz es excesivo y se practicará una rinoplastia de reducción, mientras que en otros es deficiente y necesitarán una rinoplastia de aumento. Además del tamaño de la nariz, puede estar comprometida la forma y/o posición.
Nariz asimétrica
Hay narices asimétricas o desviadas. En función de la parte de la nariz que esté afectada, será necesaria una intervención sobre la punta, sobre el dorso o sobre ambos. Es muy frecuente que los pacientes candidatos a cirugía ortognática, presente alteraciones asociadas en la nariz.
Cuando se da esta situación, en la misma intervención de cirugía ortognática en la que operamos maxilar, mandíbula o ambos, realizamos la rinoplastia. De ese modo, en un solo acto quirúrgico es posible corregir todas las alteraciones en la armonía facial.
Nariz caída
Existe una situación especial, en la cual una falta de desarrollo hacia delante del maxilar, provoca una falta de soporte de la nariz y esta cae. En estos casos, además, la nariz parece más grande. Es lo que se denomina rinomegalia relativa.
En esas situaciones no es necesario operar la nariz. La recolocación del maxilar mediante cirugía ortognática, provoca que la nariz recupere el soporte, y pase a tener un aspecto proporcionado en relación con el resto de la cara.
Mentoplastia
Mentoplastia
El mentón, o barbilla, constituye un elemento fundamental en la estética del tercio inferior de la cara. La posición y tamaño del mentón son definitivos a la hora de alcanzar armonía facial.
Una intervención sencilla
La mentoplastia es una intervención que dura 60 min., realizada con una pequeña incisión por dentro de la boca, que permite la movilización de la parte anterior de la mandíbula (mentón o barbilla) y su recolocación en la posición adecuada para la estética facial.
Complemento de la Cirugía Ortognática
Más del 50% de los procedimientos de cirugía ortognática se acompañan de mentoplastia.
En la mayor parte de los casos el mentón es deficitario y se realiza su reposición hacia delante.
Plastia de malares (pómulos)
Plastia de malares (pómulos)
El volumen y proyección de los pómulos, o malares, forma parte de los rasgos esenciales femeninos.
Pómulos hundidos
Típicamente los pacientes de cirugía ortognática que presentan una hipoplasia (posición retrasada) maxilar, tienen además una falta de desarrollo de los pómulos. Este hecho condiciona cierta “concavidad facial” que es característica del envejecimiento de la cara.
Lipoescultura de pómulos
Durante muchos años, la recuperación del volumen de los pómulos se ha realizado mediante la instalación de prótesis. Desde hace cinco años, el Instituto Maxilofacial incorporó la técnica de “lipoescultura”, para tratar el déficit a este nivel.
La técnica consiste en realizar una liposucción de alguna zona donde el paciente presente cúmulos excesivos de grasa. El material extraído se procesa aislando las células grasas que son posteriormente infiltradas en la zona de los pómulos, consiguiendo aumentarlos de manera natural.
Rejuvenecimiento facial
También es posible realizar una plastia de malares de manera aislada, bajo anestesia local y sedación, en pacientes que no presentan otro tipo de defectos, simplemente para conseguir volumen y rejuvenecimiento facial.
Queiloplastia
Queiloplastia
Los labios tienen un protagonismo esencial en la armonía facial. Conseguir unos labios bonitos y armónicos con a tu rostro es posible con sencillas técnicas.
Labios hundidos
Existen ocasiones en que la posición retrasada de dientes y/o maxilar, provoca un aspecto de labios hundidos. En estos casos, la reposición de los dientes mediante ortodoncia y/o del maxilar mediante cirugía ortognática, consigue que los labios recuperen su posición.
Labios muy finos
Otras veces sin embargo los labios son intrínsecamente finos. En esos casos, es posible aumentar el volumen de los labios mediante grasa del propio paciente.
Para este tipo de indicación se usa un depósito de grasa localizado detrás del maxilar, la llamada Bola de Bichat.
Blefaroplastia (cirugía de párpados)
Blefaroplastia (cirugía de párpados)
A partir de determinada edad, variable según cada persona, los párpados empiezan a sufrir fenómenos de laxitud que provocan la herniación de parte de la grasa de la órbita, condicionando la aparición de las famosas “bolsas”.
Rejuvenece tus ojos
En función del tipo y magnitud del problema, existen diversos procedimientos destinados a normalizar el aspecto de los párpados.
Dichas técnicas para corregir los párpados pueden realizarse de manera aislada bajo anestesia local y sedación, o en combinación con otros procedimientos de cirugía ortognática.
Ácido Hialurónico/Botox
Ácido Hialurónico/Botox
Son muchas las personas que acuden a nuestra consulta para que les ayudemos a mejorar su aspecto corrigiendo las líneas que han ido apareciendo en la cara con el paso de los años.
Dependiendo del tipo de arruga les recomendaremos rellenos dérmicos especialmente
Dependiendo del tipo de arruga les recomendaremos rellenos dérmicos especialmente
Ácido Hialurónico
Un producto natural que tiene como característica una gran capacidad de retener el agua a su alrededor. Su efecto será como el de una esponja que poco a poco el cuerpo puede ir eliminando.
Está indicado en todas aquellas arrugas o depresiones en las que nos falta tejido y necesitamos rellenar, como por ejemplo los surcos nasogenianos. Pero también en mejillas, pómulo, mentón… siempre que deseemos rellenar.
BOTOX
Es un RELLENO DÉRMICO, que repone el tejido que hemos perdido con el paso del tiempo.
Es estudiando el rostro como podremos aconsejar el tratamiento más apropiado para cada persona. El objetivo es ayudar a que las personas que confían en nosotros se sientan y se vean mejor.
El Botox (botulinum tipo A)
Fármaco que actúa paralizando temporalmente los músculos, es una sustancia segura con muy pocas contraindicaciones. Trabajará, pues en todas aquellas arrugas provocadas por el movimiento. Por ejemplo las arrugas del entrecejo
Cuando fruncimos el entrecejo los dos músculos que lo forman, se acercan entre si, formando una arruga en el centro. El Botox relaja ambos músculos y evita que la arruga se marque. Este efecto tiene una doble ventaja, por una parte trata la arruga existente, y por otra evita que con el movimiento constante de días y años la piel se dañe y profundice la arruga.
La toxina botulínica trata y previene las arrugas de movimiento. La frecuencia de los tratamientos varia de persona a persona es de aproximadamente 4 a 6 meses. El paciente, una vez realizada la aplicación de Botox, puede reincorporarse a su rutina habitual puesto que no se requiere ingreso en el centro médico.